[vc_row][vc_column][vc_column_text]Saber qué síntomas provoca una rotura de Ligamento Cruzado Anterior puede ayudar a distinguir si debemos preocuparnos o no.
Tras las entradas que hicimos sobre el ligamento cruzado anterior (¿qué es el ligamento cruzado anterior? y ¿cómo se puede lesionar el ligamento cruzado anterior?) os comentamos qué síntomas provoca una rotura de Ligamento Cruzado Anterior (LCA), aunque obviamente haber sentido o estar sintiendo alguno de estos síntomas no es indicativo de lesión, habrá que hacer diferentes pruebas funcionales y de imagen para confirmar si existe lesión y/o si es necesario operar.
Cuando existe lesión de LCA es muy común escuchar y/o sentir un chasquido dentro de la rodilla, a lo que seguidamente acontece lo siguiente:
- Dolor intenso en la rodilla e incapacidad de soportar peso sobre la pierna lesionada.
- Inflamación moderada o severa de la articulación a los pocos minutos, que se suele producir un aumento del volumen de ésta de manera rápida.
- Inestabilidad de la rodilla. Sensación de que se va y/o que falla la rodilla.
- Limitación al doblar la rodilla y/o estirarla, debido al propio dolor y a la inflamación.
- Atrofia muscular, principalmente del cuádriceps y al cabo de un tiempo, este síntoma no acontece el primer día de la lesión sino tras unas semanas/meses.
No toda lesión de LCA debe ser una rotura total de ligamento, se puede producir una elongación/ estiramiento del ligamento o una rotura parcial, que pueden o no provocar inflamación y/o atrofia pero pueden generar inestabilidad de rodilla y una incapacidad para controlar la traslación anterior y la rotación anormal de la tibia, por lo que tendríamos el mismo problema asociado que la rotura de ligamento cruzado anterior, es más, el factor más importante para determinar si el LCA debe o no operarse es precisamente esta inestabilidad de la rodilla, en la siguiente entrada hablaremos de esto.
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